Para Green Leader los proveedores no deben ser percibidos como simples engranajes dentro de la cadena de abastecimiento de las compañías, pues el esfuerzo de las empresas de transitar hacia la sustentabilidad es un desafío que requiere también que, cada una de las partes que componen su proceso productivo, tenga que estar alineada con su filosofía, tenga que contribuir a fortalecer sus buenas prácticas, y tenga que trabajar bajo una meta común: producir de forma sostenible.
Así como la Economía Circular se plantea como un cambio en el paradigma productivo de las industrias para que transiten hacia un modelo sustentable sin perder productividad ni competitividad en sus procesos, por ejemplo; de la misma manera la cadena de suministros con que operan esas mismas compañías debe transitar también -quizás con una mayor celeridad- hacia la sostenibilidad, pues se quiera o no todo suma e impacta en el camino hacia el desarrollo sostenible y en la reportabilidad de los ESG que es, al final del día, la carta de presentación de la industria en los mercados.
En efecto, todas las empresas –independientes de su tamaño o del sector en el que se desarrollan- operan en un entorno con una serie de interdependencia entre proveedores y mandantes, asemejándose a un ecosistema cuyas entidades se interrelacionan compartiendo un mismo hábitat. Esta conformación tiene incidencia gravitante en el quehacer de la industria, sobre todo, si cualquier modificación en el desempeño de una de sus partes afecta de menor o mayor medida a toda la interacción conjunta.
Para el CEO de Green Leader Environmental & Sustainability Services, el Ingeniero Civil Químico, Javier Ramírez, “desde esa lógica cabría preguntarse, entonces, ¿qué tan verde es el ecosistema en el que desarrollo mis procesos productivos? porque si lo llevamos al plano de la competitividad de las industrias, las decisiones que adoptan las empresas se efectúan buscando objetivos de rentabilidad económica, sin embargo, desde un tiempo a esta parte, especialmente, este último quinquenio, los impactos Ambientales, Sociales y Gobernanza (ASG |ESG en inglés) tienen incidencia directa en el mercado en el que se insertan y, en el caso de los proveedores, impactamos de lleno en la cadena de valor del mandante y, al final del día, en la reportabilidad que éste haga de sus ESG”.
Agrega que la estrategia de negocios en general ha ido evolucionando también y adecuándose a las nuevas exigencias. “La dinámica anterior de las industrias era comprar y contratar, y radicaban esta acción exclusivamente en el ámbito del supply chain, incluso se las consideraba como áreas de apoyo al proceso productivo, siempre detrás del ámbito de las ventas, sin embargo, hoy al conversar con líderes y tomadores de decisiones en las compañías mineras de la Región de Antofagasta, por ejemplo, ellos manifiestan que –a ojos de los mercados y finanzas mundiales- la competitividad y la sostenibilidad de la industria ya no depende exclusivamente de las ventas, sino que ahora existe una crucial variable a considerar que es saber comprar y contratar para que esos proveedores sean verdes o estén alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), de tal manera de impactar de forma positiva en los reportes anuales que son, al final del día, la información que buscan los potenciales inversionistas y que requieren también los shareholders, por cierto”.
El año 2015 creamos Green Leader –explica Javier Ramírez- como una empresa proveedora que sumase valor a la cadena de suministros de la industria minera. “Los servicios de ingeniería y las soluciones ambientales que hemos desarrollado fueron diseñados desde la mirada de la innovación y la tecnología para que las compañías no sólo se encaminasen hacia alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) y adaptasen sus procesos al cambio climático, sino que además para sumarnos a incrementar sus niveles de productividad y competitividad en los mercados”.
Due Diligence
Dentro de la cadena de valor de una empresa, los proveedores se han vuelto cada vez más relevante porque se trata de un grupo de interés estratégico, especialmente, en el tránsito hacia la sostenibilidad.
“Los proveedores no deben ser percibidos como simples engranajes dentro de la cadena de abastecimiento, pues el esfuerzo de las compañías de transitar hacia la sustentabilidad es un desafío que requiere comprender que cada una de las partes que conforman su proceso productivo tiene que estar alineado con su filosofía, tiene que contribuir a fortalecer sus buenas prácticas, y trabajar bajo una meta común: producir de forma sostenible”, explicó el CEO de Green Leader Environmental & Sustainability Services.
Desde esa perspectiva, es común observar en este último tiempo que las Due Diligence que buscan identificar, prevenir, mitigar y comunicar los impactos de las empresas en ámbitos como los derechos humanos o las finanzas, por ejemplo, han ido más allá de lo concerniente a las actividades propias de la compañía, llegando ahora al siguiente nivel de las operaciones: la cadena de suministro. En otras palabras, se busca integrar la debida diligencia a la red de proveedores a objeto de alcanzar una cadena de suministro más resiliente y sostenible.
“Green Leader Environmental & Sustainability Services es una empresa proveedora que forma parte de la cadena de suministros de la Minería en Chile, y como tal tenemos la convicción que somos un gran socio estratégico para que las compañías se inserten de lleno en un desarrollo sostenible, sin perder productividad ni competitividad. Ello, porque entendemos que cuando un mandante exige a sus proveedores estar en la línea de la sustentabilidad es porque está gestionando en coherencia con su Estrategia de Sostenibilidad”, explicó Javier Ramírez, añadiendo que implementar Protocolos Corporativos de Gestión Sostenible de Proveedores es un excelente mecanismo para una gestión de impactos y riesgos potenciales así como de relacionamiento con proveedores.